Recibió el 2025 con el mejor regalo: un nuevo riñón

Quito, 17 de enero de 2025

Nueve de sus 30 años Alexis D., nombre protegido, se sometió a diálisis y tras tres opciones fallidas, el 31 de diciembre de 2024 llegó la llamada que le cambió la vida. Recibió el año 2025 con la mejor noticia: beneficiarse de un trasplante renal en el Hospital de Especialidades Carlos Andrade Marín (HCAM).

Relata que hace nueve años le detectaron insuficiencia renal crónica terminal y se sometía a diálisis, los últimos dos años fueron de hemodiálisis, por eso se trasladó desde Guayaquil a Quito para entrar a la Lista de Espera en busca de un  trasplante renal.

Alexis, quien es afiliado al Seguro Social Campesino, estuvo tres años y medio en la Lista de Espera con la esperanza de que iba a llegar su riñón. "Estar ahí no es fácil porque se deben cumplir muchos requisitos y seguir al pie de la letra las indicaciones médicas, yo tenía que viajar hasta cinco veces al mes pero nunca me di por vencido porque hay que luchar para obtener lo que se quiere", dijo.

Comentó que el 4 de septiembre de 2021 sufrió un accidente automovilístico que complicó su situación: se fracturó la pelvis y el fémur, tuvieron que hacerle varios injertos en la pierna, estuvo 60 días hospitalizado y 17 días en UCI. "Mis familiares ya me daban por muerto porque los doctores les dijeron que la recuperación iba a ser difícil porque me hacía diálisis".

Todavía en recuperación se trasladó de Guayaquil a Quito. Sin embargo, tuvo un revés, lo sacaron  de la Lista de Espera debido a que en sus intervenciones recibió demasiadas pintas de sangre y en caso de ser trasplantado su organismo podría rechazar el órgano.

Se sometió a un examen especial que debía salir negativo para que sea candidato al trasplante. Nunca perdió la fe y el resultado sí fue negativo, así que  empezó de nuevo y regresó a la Lista de Espera.

Alexis D., relata que hace dos años él tenía la primera opción para recibir un riñón, pero lastimosamente donde vive no hay  buena señal y no entró la llamada. "Me enteré al día siguiente cuando ya había perdido el riñón. Lloré, me desesperé" pero sabía que en algún momento lo lograría. Así pasaron más opciones que no se concretaron.

El 31 de diciembre de 2024 llegó la llamada que tanto esperaba. "Faltaban dos minutos para entrar a la sala de diálisis cuando sonó el teléfono y el doctor me dijo: estás en primera opción hay un operativo de trasplante; no lo podía creer, entré en desesperación, no cabía de la alegría".

Alexis no esperaba en el último día del año recibir un riñón. "Yo me preparé para mi última diálisis pero la espera valió la pena. Fue la mejor noticia, me cambió la vida de un momento para otro", acota.

Cuenta que cada vez que iba a la diálisis se despedía de su familia porque no sabía si iba a regresar. "En mi sala éramos 17 personas pero sólo quedé yo porque los otros compañeros fallecieron; fue muy duro".

Alexis está agradecido con su donante porque le dio una nueva oportunidad de vida. "Esta bendición cualquiera no lo consigue".

Una de sus primeras metas luego del trasplante es terminar sus estudios. "Nunca es tarde, lo haré por mis hijos para sacarlos adelante y darles un mejor futuro.  Voy a buscar nuevos horizontes y cumplir los sueños que tuve de pequeño, dijo.

Además, hizo un llamado a todos los pacientes que esperan un donante. "Les pido que no se desesperen, ya les debe llegar su tiempo, todo está en manos de Dios. Crean en la donación, que sí existe."

Ratifica que el seguro social es muy bueno. Por ejemplo, yo sigo vivo gracias a ello y estoy muy  agradecido, me salvaron la vida porque no tenía los 40 o 50 mil dólares para esta operación. En mi caso cubrieron mis operaciones y las diálisis, acotó.

Agradece al personal de salud que le brindó un acompañamiento previo y posterior  al trasplante. "La diálisis es vida pero fueron tantos años que ya no aguantaba. Ahora me siento feliz, antes vivía con temor porque sentía cerca la muerte".

"El trasplante renal me salvó la vida. Dios me dio una nueva oportunidad, es como volver a nacer, es comenzar de cero. Siento una alegría inmensa, lo que viví se queda en mi historia. Yo sé cómo se sufre y por eso daré mi testimonio para que más personas se sumen a la donación y salven vidas", reitera emocionado Alexis D.