Sin donante no hay trasplante ni posibilidad de una nueva vida
Cuenca, 3 de febrero de 2025
"Sin donante no hay vida", con esta frase Martha Q., nombre protegido, envía un mensaje a la ciudadanía sobre la importancia de donar órganos para mejorar la calidad de vida de quienes los requieren.
Ella se benefició de un exitoso trasplante renal realizado en el Hospital de Especialidades José Carrasco Arteaga (HJCA) del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), en Cuenca. "Seres humanos como los que hay aquí, no hay en otro Hospital", resaltó.
Martha Q., oriunda del cantón Zaruma, provincia de El Oro, relató que le detectaron poliquistosis renal en una clínica privada de su ciudad natal, por lo que inició su tratamiento de diálisis en el cantón Piñas.
"Iniciamos con los trámites para el trasplante en Guayaquil y posterior decidimos hacerlo en Cuenca. Yo seguía en Piñas, pasó un año y recibí la llamada. Fue una gran alegría. Vinimos a Cuenca con mi esposo y mis hijas; la atención fue enseguida, me ingresaron al quirófano y salí muy bien", comentó.
"Antes de la cirugía estaba nerviosa. Me dijeron que debía tener calma, que esté tranquila y cuando ingresé a quirófano, el doctor me dijo que estaba en buenas manos, que no tenga miedo, que todo va a salir bien; y así fue".
Martha Q., acompañada de sus hijas, acude cada dos meses para sus controles médicos y los exámenes pertinentes. Afirma que su vida cambió totalmente. "En las diálisis tenía vómitos, decaimiento del cuerpo, no comía bien. Ahora con el trasplante es diferente, valgo por mí misma, puedo hacer mis cosas, mi vida cambió totalmente. Es muy diferente estar atado a una máquina que tener un órgano bien".
Antes de culminar su visita al HJCA, Martha envío un mensaje para que la gente sea donante y así cambie la vida de quien lo necesita. "cuando nos vamos de aquí no nos llevamos nada, todo se queda bajo tierra; sería una excelente oportunidad que todas las personas, que tengan la posibilidad de donar cualquier órgano y están bien de salud, ayuden a las que están con diferentes enfermedades. Sin donante no hay vida. No tengan miedo, en vida firmen que sean donantes activos", remarcó.
La beneficiaria agradeció la atención brindada y el trato del personal. "Nunca he tenido la oportunidad de agradecerles a todos, hoy lo hago porque son unas excelentes personas".